Debemos concienciarnos de que al Ginecólogo no sólo se debe acudir por un problema médico. La revisión ginecológica asintomática sirve para prevenir enfermedades o para tener acceso a asesoramiento en diversos temas, como pueden ser sexualidad, los métodos anticonceptivos o los hábitos ginecológicos.
La adolescencia es un momento de grandes cambios en el que pueden surgir múltiples dudas. Por ello, el primer contacto con el Ginecólogo puede servir para iniciar una relación de confianza con un profesional al que las pacientes tendrán acceso para resolver las dudas que les vayan surgiendo, en un sitio seguro para ellas.
Tampoco hay que olvidar que también pueden surgir patologías propias de la pubertad que también deberíamos conocer para acudir a la consulta. Las principales causas para acudir al Ginecólogo en esta etapa son:
- Alteraciones menstruales: con sangrados muy abundantes, que pueden provocar anemia o irregularidades menstruales. Son muy típicas en los primeros años, al inicio de las menstruaciones, pero se pueden prolongar en el tiempo.
- Dismenorrea o dolor de regla: generalmente suele ser leve y ceder con analgésicos comunes. Sin embargo, si el dolor es grave e incapacitante, sería necesario un estudio más exhaustivo y buscar alguna posible causa.
Otros motivos por los que se debería acudir a consulta podrían ser la pubertad retrasada, los nódulos mamarios, la mastodinia inespecífica, las infecciones vulvovaginales, el hirsutismo, la solicitud de métodos anticonceptivos, etc.