Entre un 30% y un 50% de mujeres en edad reproductiva que padecen endometriosis pueden experimentar infertilidad debido a esta afección que se caracteriza por la presencia de tejido endometrial fuera del útero, lo que puede influir en la implantación del embrión en el endometrio.
Los analgésicos y los tratamientos hormonales son efectivos para aliviar el dolor y regular los ciclos menstruales, sin embargo, puede ser necesaria cirugía para mejorar la fertilidad y aumentar la probabilidad del embarazo.
Si el embarazo no llega después de la operación y tras haber estado intentándolo un tiempo prudencial, las técnicas de reproducción asistida son la mejor opción para estas mujeres. La inseminación artificial está indicada para pacientes jóvenes con endometriosis leve -grado I y II-, mientras que la fecundación in vitro es la técnica más adecuada para mujeres con endometriosis con una afectación mayor, es decir, una endometriosis tipio III o IV.
Además, en el laboratorio FIV se ha observado que, tanto los óvulos como los embriones de pacientes con endometriosis, tienen una peor morfología por lo que pueden verse obligadas a recurrir a la ovodonación.
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